TALLER DE EXPERIMENTACIÓN: ¿Flota o no?

La sesión de psicomotricidad de ayer fue muy especial porque además de hacer nuestro calentamiento y nuestro juego, realizamos un ¡¡EXPERIMENTO!!

Como estamos trabajando los medios de transporte, la sesión de ayer giraba entorno a los mismos.

Hicimos desplazamientos por el patio imitando diferentes medios de transporte (avión, tren, moto…) para calentar antes de comenzar el juego.

Posteriormente, dio comienzo el juego “Pasajeros al tren” en el que la mitad de la clase eran trenes y la otra mitad pasajeros. El juego consistía en que los trenes debían circular por el espacio imitando su sonido y recogiendo a los pasajeros que se fuesen encontrando por el camino. De este modo, los trenes se iban haciendo cada vez más largos.

Por último, hablamos de los barcos y su propiedad de flotar por el agua, lo que utilizamos como enlace para realizar nuestro experimento.

Comenzamos haciendo la pregunta del millón ¿Qué es un experimento?

A lo que contestó Alberto de la clase de 3 años B “es ciencia”

Volvimos a formular otra pregunta ¿Cómo se hace un experimento?

A lo que volvió a contestar Alberto “haciendo pruebas”

Conclusión a la que llegamos después de mucho pensar y debatir: los experimentos son pruebas que tenemos que ir haciendo para ver si conseguimos los que estamos buscando.

¿Qué buscamos? Probar de todos los elementos que teníamos (tapón de corcho, piedra, tapón de plástico…) si flotan en el agua o no.

Y ¿Qué es flotar? Después de mucho conversar, todos estuvimos de acuerdo que era igual que cuando nos ponemos los manguitos en la playa para no hundirnos en el fondo y quedarnos encima del agua.

Así que, por fin, comienza la experimentación: fuimos probando y analizando qué elementos flotaban o no, pero la sorpresa fue cuando la seño de prácticas Mª Carmen nos contó un cuento “La Tita Margarita”. Su tita realizó muchos viajes y en cada uno de ellos descubría algo nuevo y se lo mostraba a los nuevos amigos que iba haciendo por el camino. En este caso era cómo es posible que un huevo flotase en el agua. 

Probamos y el huevo se iba al fondo del recipiente que teníamos lleno, a lo que los niños se dieron cuenta que había un paquete de sal. ¿Y si le echamos la sal al agua que ocurrirá? Probamos y ¡¡SORPRESA!!, el huevo se puso arriba, flotando. Los ojos se les iban a salir de sus caritas mirando el huevo.

Para explicar el experimento pusimos la comparación del agua de la playa y la piscina, una con más capacidad para flotar que la otra, lo mismo que le ocurrió al huevo de la Tita Margarita.

No me extiendo más porque hay para contar y contar, ayer jueves fue un día super productivo.

Aquí os dejo unas fotos de la experiencia para que disfrutéis con ellas igual que lo hicimos nosotros ayer.

¿Qué os parece que nos convirtamos en científicos?